¿Sabías que la resistencia antimicrobiana es uno de los problemas de salud más importantes en la actualidad?
De hecho, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), es considerada como una de las 10 principales amenazas a la salud pública.
Esto se debe a que los antimicrobianos son medicamentos que nos ayudan a combatir infecciones y la resistencia a ellos, puede provocar serias consecuencias en la salud e incluso la muerte.
Los antimicrobianos más comúnmente usados son los antibióticos, sin embargo, también hay antimicrobianos contra virus y hongos.
La resistencia a estos medicamentos ocurre cuando los organismos pueden resistirse a sus efectos y por lo tanto, evitar la resolución de la infección.
En este artículo, te contaremos por qué ocurre la resistencia de las bacterias a los antibióticos y qué podemos hacer al respecto.
¿Por qué ocurre esta resistencia?
Las bacterias tienen una capacidad natural para combatir los antibióticos y este mecanismo está presente mucho antes de que el humano descubriera los antibióticos.
Esto se debe a que se valen de recursos que se encuentran en la naturaleza para ayudarlos a sobrevivir y alterar sus genes para poder resistirse al efecto de los antibióticos.
También, las bacterias son microorganismos que están compitiendo por sobrevivir y por lo tanto, sus genes van desarrollándose para tener dichas capacidades, incluyendo la de luchar contra aquello que les hace daño.
Sin embargo, el uso masivo de antibióticos (no solo en humanos a nivel clínico, sino también en los animales de granja) ha hecho que esta capacidad de resistencia se vuelva más generalizada.
Incluso, se reporta que hasta 2/3 partes del uso de antibióticos ocurre en la producción de animales.
Por lo tanto, la resistencia a antibióticos está dada al final por la conexión entre tres dominios diferentes: la salud del humano, de los animales y del ambiente.
Otros factores que contribuyen a la resistencia antimicrobiana
Otros factores conocidos que están contribuyendo a la resistencia incluyen que, en nuestro país, hay poca vigilancia con respecto al uso de antibióticos.
Esto aunado a que, en los hospitales con mucho volumen de pacientes, existe poca higiene y menor acceso a una mayor gama de antibióticos.
Sin embargo, también la resistencia puede darse por factores socioeconómicos como la migración de humanos y animales, mayor número de viajes, conflictos mundiales, cambio climático, etc.
La contaminación también juega un papel importante
Los antibióticos actúan sobre el ambiente después de ser excretados tras su uso (por la orina y heces).
Además, contaminan el agua y la tierra tras un deshecho inapropiado, impactando con esto el crecimiento de las plantas.
La tierra y las plantas se vuelven alimento para los animales y con esto la transmisión de genes se vuelve una cadena.
Algunas de las bacterias multidrogo resistentes que se conocen son:
- Staphylococcus aureus (S. aureus)
- Escherichia coli (E. coli)
- Klebsiella pneumoniae (K. pneumoniae)
¿Qué podemos hacer por nuestra parte?
Existen algunas recomendaciones que podemos seguir para limitar esta resistencia a los antimicrobianos.
A continuación, te compartimos algunas:
- Limita el consumo de productos de origen animal.
- Sigue las recomendaciones de tu doctor cuando te refiera que no requieres antibiótico para tratar una infección.
- Utiliza antibióticos únicamente cuando sea realmente necesario.
- Desecha adecuadamente los antibióticos que no utilices.
- Desecha la orina y heces de forma adecuada (utilizando un inodoro).
- Vacúnate de acuerdo a las recomendaciones universales.
Recuerda que, a través de cambios en el estilo de vida, tú puedes mejorar tu salud y hacer tu cuerpo más resistente frente a las enfermedades.
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